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Experiencia de Noelia Cebrián en Honduras

 

Hace un tiempo que las Hermanas de la comunidad de Honduras habían solicitado colaboración y apoyo para la escuela de educación especial, Ángeles de Esperanza en San Juan de Opoa.

Durante las vacaciones de Semana Santa por fin pude responder a esa llamada. Después de más de 12 horas de avión, el abrazo de las Hermanas sienta como “estar en casa” a pesar de los kilómetros.


Cada día a las 5 de la mañana sonaba el despertador, un buen café de la tierra y en marcha a las 6 con el autobusito para realizar las dos rutas que recogen a los alumnos desde San Rosa de Copán, para poder llevarlos a la escuela.


Fueron días de mucho trabajo, no menos de lo que Hermanas y profesoras realizan cada día. Un día a día silencioso, lleno de esperanza, de ilusión, de ganas y de alegría que contagian a quien tenemos la suerte de pisar esa misión.


Abrazos, miradas, sonrisas, gritos…una propuesta metodológica basada en el trabajo por proyectos, que incluye las Inteligencias múltiples, la taxonomía de Bloom, el Método Verbotonal, las herramientas digitales…todo para potenciar el pensamiento de los alumnos, maximizar a tope el aprendizaje curricular y rehabilitador y hacer consciente a todo el equipo docente y a los propios alumnos, de que ellos, de que nosotros, juntos…podemos!


Extendimos el aprendizaje y la nueva metodología de trabajo a autoridades educativas, familias, docentes y curiosos que se acercaron a la Casa de la Cultura de Santa Rosa.


Regresé muy cansada, pero me quedo con la alegría del trabajo bien hecho, pero sobre todo con el agradecimiento a las Hermanas que siguen a pie de cañón cada día… silenciosas, atendiendo a los que llaman a su puerta y llevando la Paz y Bien a tantos rincones, a tantas necesidades, a tantos corazones… gracias queridas Hermanas, por dejarme ser parte de ello esos días, gracias por dejarme acompañaros…gracias por esa enseñanza que me habéis dejado con el simple hecho de haberme regalado vuestro ejemplo.
Y gracias al colegio Ángeles de Esperanza…a esas profesoras que me han enseñado que cuando no hay apenas nada, se consigue todo siendo un equipo abierto al aprendizaje, una Fraternidad! Profesoras con ganas de buscar y luchar por lo mejor para sus alumnos y sobre todo creyendo que es posible y haciéndolo realidad! Gracias compañeras, habéis sido para mi un gran ejemplo de lucha y superación!


Os dejo un poquito de lo que hemos trabajado…me guardo tanto, tanto…vivido, pero sobre todo sentido.

  

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